Hoy no

En esta amalgama de pensamientos me viene a la mente una cosa que hace tiempo quería decir.

Tanto tiempo pensando en lo que me hace daño o no me gusta, gritando al mundo mi opinión sabiendo que no será escuchada. Puede que un solo segundo al día sea suficiente para descargar sobre mi todo ese dolor que me produce tu marcha, me cansa el hecho de no poder recurrir a ti cuando necesito ese consejo que me falta.
Puedo suponer que todo es cosa de fe, que solo necesito creer que estas allí mirando con la cabeza bien alta, con tu sonrisa que dice: estoy orgulloso de ti.
Necesito saber que no te he fallado,que sigues pensando que hago lo correcto pero lo que mas necesito es esa presencia, la que era capaz de hacerme fuerte. Con cada paso que doy en la vida puedo pensar que estas aun mas orgulloso de mi, no funciona si no lo sé.
Cuantas veces dijiste aquellas palabras que hoy son un recuerdo, cuantas veces me arrepentiré de no haberte hecho caso, mi fallo y ahora mi pena. Nunca pensé en la posibilidad de llorar tanto, a solas, en mi intimidad, sin ocupar la preocupación de nadie; puede que un día consiga volver a abrir esa ventana sin miedo a caerme por ella, de momento sigue cerrada, mirando a través de ella sin pensar, solo observo el mundo danzante que hay fuera. Puedo recordar tu mano en ese ultimo momento que vivimos juntos, no quiero y sin embargo la recuedo, ese es mi tormento.
Tu querrías un chiste, en vez de lamentos; una sonrisa, en vez de lágrimas. No puedo, lo siento.

¿Quien me acuna ahora?

Un día le mostrare al mundo de lo que estoy hecho pero hoy no, hoy no.